Su aspecto era éste antes de trabajarlo:
En definitiva un clon como tantos de esos arbolitos que venden llamándoles bonsai. Simplemente es una planta en una maceta de bonsai pero dista mucho de ser un bonsai. Un bonsai debe transmitir y hacernos sentir ante un árbol majestuoso. Realmente es dificil sacar algo así de un material tan simple pero la verdad es que éstos pequeños olmos dan bastante juego y permiten desarrollar nuestra creatividad y hacer bonsai por muy pocos euros.
Casualmente cayó en mis manos una piedra de esas que me gustan. Con agujerito así que éste olmo ya tenía "maceta". Lo primero era preparar la piedra.
Como se puede ver había dos buenos agujeros de drenaje en la parte inferior. He decidido no utilizar ningún plato ni maceta bajo la piedra. Toda ella será la maceta. Así que para evitar perder el sustrato hay que colocar rejillas. Para ello las pego con ésta masilla.
Está formada por dos compuestos. Una blanco y otro negro. Al mezclarlos termina dando una masa a modo de cemento. Es ideal para éstos trabajos ya que cada vez que en cada ciclo de mojado y secado propios del riego se endurece cada vez más.
Vista desde arriba:
Y ahora con el olmo:
Es un arbol creciendo en un paisaje rocoso así que tenemos que pensar que su vida no ha sido facil. Hay que añadir algo de dramatismo a modo de madera muerta. En pocos meses el vigor de ésta especie hará que aparezca un fuerte labio de cicatrización.
Trabajo terminado por el momento. Será un buen árbol.
super precioso....
ResponderEliminarmuy bonito, me has dado una gran idea para mis "olmos redondos..."
ResponderEliminarGRacias
EliminarMuy bonito comienzo!! En unos años debe ser espectacular. Seguire este proyecto, espero que vayas completando la evolucion.
ResponderEliminarGracias Alejandro. Esto es lo bueno de hacer bonsai. Con muy poco se disfruta.
EliminarEnhorabuena por el trabajo. Tengo curiosidad por ver como ha evolucionado
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